Conoce la importancia de las cortinas al momento de dormir
La mayoría de las personas tienen algún tipo de cortina, ya sean cortinas tradicionales o con motorización powerview. ¡Sin duda, tu ventana tiene algo más que un simple cristal! Pero, ¿cuándo se convirtió en norma cubrir las ventanas? Y si elegimos dormir con las cortinas abiertas, ¿es probable que eso perturbe el sueño?
Uno de los principales factores que contribuyen a un sueño intranquilo es tener demasiada luz en el dormitorio. A continuación, te mostramos todo lo que necesitas saber sobre la importancia de las cortinas, desde la ciencia que hay detrás de ellas hasta la historia de la decoración de las ventanas.
La historia de las cortinas
Antes de la creación de la calefacción central y el doble acristalamiento, el objetivo principal de las cortinas era retener el calor en las habitaciones. Es decir, en el pasado se colgaban pieles de animales en los huecos de puertas y ventanas, así se evitaban las corrientes de aire y se conseguía la intimidad.
Antes del siglo XVI, las cortinas solían utilizarse para crear espacios privados y zonas de separación en los castillos. También, en esa época las cortinas de pared eran populares para proporcionar decoración y calidez a los fríos muros de piedra. Sin embargo, las cortinas sobre las puertas eran más comunes que las ventanas.
No fue hasta el siglo XIII, cuando se perfeccionó el proceso de fabricación del vidrio y se produjo el auge de las cortinas para ventanas durante el periodo renacentista. El objetivo principal de las mismas era ahora proteger la intimidad de los que estaban dentro.
Por último, las cortinas se hicieron cada vez más populares entre las clases medias debido a la producción en masa de textiles en el siglo XIX. En esta época, las telas eran típicamente de color oscuro, ya que los tejidos de color eran muy caros.
¿Por qué son importantes?
¿Sabías que el cuerpo humano se ve afectado habitualmente por la luz y la oscuridad? Cuando se te priva el sueño, tu cerebro no funciona de forma correcta, lo que afectaría a tus capacidades cognitivas y a tu estado emocional. Y si se prolonga, puedes disminuir tus defensas, lo que supone un riesgo de desarrollar enfermedades crónicas.
En la actualidad, la vida moderna se caracteriza por la iluminación de nuestro mundo a cualquier hora de la noche. Por ello, los estudios demuestran que el exceso de luz en el dormitorio puede afectar a la calidad del sueño, alterando el ritmo cardiaco natural.
Asimismo, dormir en la oscuridad ayuda a producir la hormona melatonina. Esta hormona natural es un poderoso antioxidante que sirve para prevenir el cáncer y otras afecciones del organismo.
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El propósito de las cortinas
No hace falta decir que los tipos de cortinas tienen más funciones que las de complementar la combinación de colores de la ropa de cama. Por ejemplo, los modelos de cortinas blackout no solo ayudan a dar un poco más de calidez a tu dormitorio y a evitar a los curiosos, sino que tienen un fuerte efecto en tu calidad de sueño.
Por ende, si alguna vez te has despertado porque alguien prendió las luces del dormitorio, sabrás que la luz hace que el cerebro se despierte, y las cortinas o las persianas son tu mejor opción para evitarlo.
Y ¿cómo nos despierta la luz? La exposición a la luz estimula una vía nerviosa que va desde la retina del ojo hasta una zona del cerebro llamada hipotálamo. Esta zona funciona como un reloj interno, iniciando un patrón regular de actividades que afectan a todo el cuerpo y, en consecuencia, nos despiertan.
¿Por qué dormir sin ellas puede causar problemas?
Las cortinas son una forma práctica de bloquear las luces de la calle o los faros que se filtran por las ventanas en mitad de la noche y que interrumpen el descanso nocturno. Entonces, si entra una mínima cantidad de luz en el dormitorio mientras duermes, se suprime la liberación de melatonina.
Como mencionamos arriba, la melatonina es una hormona que se libera en la glándula pineal, en el interior del cerebro y nos hace dormir más. Por ende, demasiada luz significa muy poca melatonina y, por lo tanto, puede ser difícil conciliar el sueño.
Por otro lado, en verano, la exposición a la luz puede afectar negativamente al sistema circadiano por un cambio de fase no deseado. Por eso, te recomendamos el uso de persianas, antifaces y un sueño reparador programado para contrarrestar este efecto.
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¿Cómo dormir mejor por la noche?
Si quieres optimizar tu salud, dormir bien es una de las cosas más importantes que puedes hacer. Sin embargo, existen otras soluciones para dormir mejor por la noche, entre ellas incluyen:
- Evita las luces brillantes por la noche, ya que confundirán tu reloj corporal.
- Asegúrate de hacer suficiente ejercicio durante el día, pues este junto con el sueño, te reabastecerá física, mental y emocionalmente.
- Presta atención a lo que comes y bebes. Es recomendable no ir a la cama demasiado lleno y no tomar cafeína cerca de la hora de acostarte.
- Reduce o deja de hacer siestas durante el día. Aunque las "siestas energéticas" cortas han demostrado ser beneficiosas, las siestas largas o irregulares durante el día pueden afectar de forma negativa tu sueño.
- Intenta seguir un patrón de sueño regular. Acuéstate a la misma hora todas las noches e intenta levantarte a la misma hora todos los días.
Hasta aquí, hemos visto los beneficios de las cortinas a la hora de dormir. Recuerda que al momento de decidir las cortinas para tu casa, debes tener en cuenta el aspecto que quieres conseguir, el estilo de tu hogar y, sobre todo, el ambiente adecuado de descanso.
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